Review Super Mario Odyssey
Tranquilos, el hype aún corre por mis venas y aún no recupero el sueño, pero trataré de contarles de que va esto sin caer en los SPOILERS y sin verme tan fanboy, este es nuestro Review de Super Mario Odyssey
Super Mario Odyssey llegó después de años de espera a la plataforma portable y de mesa favorita del momento, la Nintendo Switch, mostrando que incluso las franquicias viejas o repetitivas (como muchos se atreverán a decir) pueden tener una actualización brutal, tanto en ambiente, mecánicas y sobre todo jugabilidad para así convertir al juego en una OBRA MAESTRA.
Un poco de historia no caería mal…
Aquellos jugadores que fueron de los 90’s no podrán decirme que ya olvidaron la primera vez que tuvieron en sus manos, o que jugaron, uno de los videojuegos que han quedado como «legendarios» durante esa década, diseñado por Shigeru Miyamoto y lanzado el 13 de septiembre de 1985, el primer Super Mario para la NES.
En un principio las dinámicas y la historia eran simples, vivías las aventuras de los hermanos Bros. en su misión de rescatar a la princesa Peach de las manos del Rey Koopa a través de una vasta cantidad de mundos en 2D, brincando sobre obstáculos muy precisos y no dejando que llegaras al borde de la muerte mientras acababas con miles de goombas, plantas piraña y decenas de enemigos.
Pasaron aproximadamente 32 años hasta que Nintendo presentó el 12 de Enero del 2017 en su Nintendo Direct, un juego que sin saberlo o imaginárnoslo, dejaría una huella muy grande en el mundo de los videojuegos, una presencia tan marcada que muchos juegos podrían replantearse a partir de este suceso. Super Mario Odyssey había llegado para quedarse, considerándose hoy en día el segundo juego más vendido del año estando a nada de acabar el 2017.
Las cosas habían cambiado y era hora de ver lo que Nintendo tenía entre manos.
El contexto no lo es todo, pero sí es necesario.
La narrativa de Super Mario Odyssey no ha cambiado, tu trabajo sigue siendo ayudar a Mario a rescatar a la Princesa Peach de las garras del Rey Koopa. En esta ocasión contarás con la ayuda de un personaje muy amigable y cálido, que literal, será parte en tu atuendo, estoy hablando de Cappy, un pequeño sombrero que ha perdido a su hermana por el mismo esperpento que robo a la Princesa.
Los pequeños también merecen un juego de este calibre.
Un detalle muy amable que Nintendo nos ofrece son dos modalidades que sobre todo están pensadas para los mas pequeños de la casa. Uno de ellas es dejar que Cappy te guié por los mundos para saber qué tienes que hacer, mientras que la otra te brinda la total libertad de ir a donde tu quieras durante tu aventura.
Un estilo de juego único y nuevo para la franquicia del bigotudo…
En el primer momento que jugué Super Mario Odyssey me sentí revitalizado, ya que ahora los mapas que te presentan desde un inicio son de alguna forma más amplios y bastos, con música, atuendos y ambientes que van muy de la mano con la tematización del mundo que estás jugando.
Recordemos que ahora cuentas con nuevas mecánicas, una de ellas y la principal se centra en aventar a tu gorra (ahora Cappy) por los aires para así obtener monedas, derribar enemigos, activar ciertos interruptores o incluso capturar a ciertos personajes para transformarte en ellos.
Nunca olvidaré el momento cuando llegué corriendo al segundo mundo solamente para convertirme en el T-Rex.
En esta ocasión nos trasladaremos por los mundos a través de una nave que llamaremos la «Odyssey«, la cual para nuestra sorpresa, funciona con «Lunas» y técnicamente es controlada por Cappy. Deberemos barrer una y otra vez los mapas para así conseguir la máxima cantidad posible de Lunas y lograr que la Odyssey nos lleve a nuevos mundos por descubrir.
Los incentivos no podían faltar, y más si implican un cambio de ropa.
Asimismo, recolectaremos las clásicas monedas amarillas que conocemos y también unas «monedas» de color morado por mundo. Esto quiere decir que cada mundo, si mal no recuerdo, cuenta con 50 monedas únicas y con formas diferentes por recolectar. A diferencia de otros juegos de Mario, recolectar monedas no solo nos incentivará con vida, sino que también podremos comprar Lunas y una infinidad de nuevos trajes para nuestro personaje favorito, mismos que se desbloquearán conforme vayamos avanzando en el juego y van desde Mario con traje mexicano, prehistórico o hasta un traje para recordar a Luigi (¡SORPRESA!).
Un juego sin límites y con mucho que hacer.
Un atractivo asombroso es la cantidad de cosas que podemos hacer en los mundos, inclusive de tan solo recordar New Donk City se me enchina la piel, ya que era una travesía intentar llegar a los edificios más altos o a las locaciones alejadas del mapa (como quien dice, tratar de romper el juego) a partir de combos y brincos que conforme te vayas acostumbrando al juego, podrás desarrollar en un abrir y cerrar de ojos.
Los mundos por si solos presentarán retos con un muy buen nivel, algunos que no podré olvidar (sin caer en el SPOILER) serán los últimos 3 mundos, los cuales me hicieron llevarme unas cuantas horas haciendo corajes, donde tenía que medir muy bien los tiempos para así realizar unos cuantos combos y poder pasar de una plataforma a otra. No todos los niveles son de agua o tierra, por lo que podrías llevarte una quemada la cual te quitará vida con cada error que cometas.
Mario Odyssey no sería lo que es, sin sus ENIGMÁTICOS enemigos.
No podríamos perdonar que cada Mundo no cuente con al menos un jefe o tal vez dos al final de este. Para tu sorpresa, dependiendo del nivel, este contará con un jefe final sí o sí, que sin duda alguna te forzará a usar las nuevas mecánicas que Super Mario Odyssey tiene para ti, y que van desde correr y brincar obstáculos por la plataforma y esperar el momento oportuno para transformarte en algún personaje cerca, así buscar la manera de alcanzar al jefe y solo así hacerle mucho daño al desgracia…
Cabe mencionar que Nintendo sabe complacer a su público, ya que en ocasiones tendrás ciertos altercados entre niveles y posiblemente quedes atrapado en algún mundo desolado donde solo verás unas cuantas plataformas y lo único que tienes frente a ti es un enemigo INIMAGINABLE en la saga, que sin duda alguna, te llenará la sangre de emocion para así, ir corriendo a pelear con el.
Conclusiones.
Sin duda alguna me gustaría hablar más del juego ya que se ha convertido en uno de los videojuegos que más he disfrutado en mis casi 28 años, pero terminaría cayendo en el SPOILER.
Además, es muy emocionante el recordar ese último nivel, ese nivel que apuesto puso a muchos a temblar y a gritar de felicidad en su sala de juego, ese nivel que será recordado por años, que contaba con un landscape maravilloso, único en su clase y brutalmente ÉPICO, mientras nuestra vida estaba al límite, donde sabías que morir arruinaría esa sensación, ese momento de supervivencia que el juego había logrado durante ya unas horas y la única manera de completarlo como debe de ser era correr y destruir todo a nuestro paso.
Incluso me atrevería a decir que si deseas experimentar de la mejor forma dicho juego, te recomiendo jugarlo en tu pantalla o monitor favorito, con los joycons desacoplados, ya que es la única manera en la que podrás exprimir el potencial del HD Rumble y de la jugabilidad única que estos ofrecen.
Una vez que pruebes este modo, nada será como antes.
Sin alardear y apoyando a los medios del mundo, Super Mario Odyssey pasa a ser uno de los mejores juegos que tendremos durante lo que resta del año y del que viene, convirtiéndose en una OBRA MAESTRA para la Switch, no solo por su nueva jugabilidad, sino por el diseño de mundos, enemigos y música, las nuevas modalidades, mecánicas y sobre todo, por brindarnos un gameplay fresco para los fieles seguidores y jugadores que confían en la compañía.
Me atrevo a decir que Super Mario Odyssey tiene que convertirse en un MUST HAVE para las bibliotecas de los poseedores de una Nintendo Switch, e incluso para aquellos que aún no cuentan con la consola o posiblemente lleven años lejos de la saga. Créanme que es el momento de volver y darle una oportunidad a Nintendo una vez más, de recordarnos nuestra infancia y posiblemente la razón principal del por qué amamos hoy en día los videojuegos, siendo ellos una de las primeras compañías en brindar experiencias únicas al mundo.
Lo único que me queda decir antes de consumir por completo mi fanboyismo del año sera…
¡GRACIAS POR TODO NINTENDO!
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