Imagen: Cortesía One Sporthus
Después de la experiencia en las 24 Horas de Le Mans, el piloto
mexicano Roberto González está listo para correr en el Infierno Verde, el circuito de Nurburgring en Alemania, en la cuarta ronda del
Campeonato Mundial de Resistencia, FIA WEC, que se disputará a partir de este viernes.
Imagen: Cortesía One Sporthus
El mexicano manejará el Oreca-Gibson Nº 25 de la escudería CEFC Manor TRS Racing a lado del ruso Vitaly Petrov y el suizo Simon Trummer, con quienes desafortunadamente no logró el resultado esperado en el circuito de La Sarthe.
Sin embargo, la experiencia en Le Mans no fue del todo mala dado que el equipo demostró que han encontrado una puesta a punto competitiva dado que en la calificación se ubicaron en las dos primeras líneas. El Infierno Verde es una pista diferente, con condiciones de asfalto más abrasivo en sus 16 curvas y sus 5.148 kilómetros de longitud.
La carrera en Alemania marca el inicio de la parte más complicada del calendario y la última parada en Europa antes de que la serie inicie su gira en América y Asia.
«Después de una espera muy larga después de Le Mans,
casi un mes, regresamos a las pistas a Nurburgring. Este es un
circuito muy técnico, algo complicada, con un circuito algo angosto lo cual hará más compleja la situación para los pilotos, en especial en el WEC, donde en casi cada vuelta hay rebases, en nuestro caso con los GTs. En una parrilla tan competitiva como la LMP2 en un circuito tan angosto complica más los adelantamientos.Estoy muy emocionado de regresar al Nurburgring. Hace 15 años que no corro en esta pista. En cuanto a nuestro coche ya vimos en Le Mans que dimos un paso adelante muy importante, éramos dominantes hasta que tuvimos el incidente que no fue nuestra culpa. Con esta experiencia sabemos que el coche ha mejorado y esperamos en esta ocasión ser competitivos. La realidad de la situación la veremos el viernes”, comentó Roberto González.
Horarios
Compártenos tus comentarios