Al ingresar a la parte final de la temporada del E-Prix, Vergne aún tenía una ventaja considerable en la tabla de puntos y solo necesitaba evitar un final sin puntaje para colocarse en una posición privilegiada para recoger el premio.
Después de luchar nuevamente en el primer grupo de clasificación, el francés se encontró en el puesto 12 en la parrilla y buscaba ganar lugares durante la carrera. Sin embargo, no fue el único contendiente al campeonato que estaba ansioso por hacer un movimiento hacia adelante, con Lucas di Grassi y Mitch Evans que no pudieron llegar a la tanda de súper poles.
Pero a pesar de los mejores esfuerzos de Sebastien Buemi, sus oportunidades en el campeonato se vieron reducidas después de que Alexander Sims lo venció, perdiendo los tres preciosos puntos que se ofrecen.
Vergne mantuvo a Di Grassi y Evans en su visión y controló con calma su destino en el campeonato, negociando su camino hasta el noveno lugar en la carrera. Aunque se resolvió poco antes de cruzar la meta y rápidamente se convirtió en una formalidad cuando di Grassi y Evans se tocaron y terminaron en las barreras a solo cuatro curvas de la bandera a cuadros.
Teniendo dos lugares más en la última vuelta, Vergne saltó hasta el séptimo lugar y cruzó la línea para confirmar su lugar en los libros de historia como el primer doble campeón y el primer piloto en defender con éxito su título.
Frijns se defendió de Sims y Buemi para terminar en los puntos por primera vez desde que ganó en las calles de París en abril. El resultado movió a Frijns al cuarto lugar en la clasificación y marca el primer podio de Sims en la Fórmula E.
Es hora de celebrar, pero la cuenta regresiva ha comenzado para la nueva temporada, con el Campeonato de Fórmula E retomando nuevamente en Ad Diriyah el 22 y 23 de noviembre.
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