[Review] Corazones de Hierro
Uno de los géneros que ha tenido mayor éxito en el cine es el de tipo bélico. Muchos filmes sobre este tema, que es uno de los principales problemas que ha existido en el mundo desde el inicio de nuestra existencia, han sido expuestos en la pantalla grande, reflejando en varios casos, las desgracias que han acarreado. Entre las más famosas podemos mencionar Rescatando al soldado Ryan, La lista de Schindler y Zona de Miedo, entre otras, siendo una de sus grandes las características lo visualmente fuerte que pueden llegar a ser.
Corazones de Hierro (Fury) es una película que a pesar de no brindar nada nuevo a la mezcla, se unirá a la lista, y es que su gran historia y personajes hacen que se consagre como una excelente película llena de acción y momentos de tensión.
La trama se centra en un escuadrón de tanques de la Segunda Guerra Mundial, con una compañía muy peculiar liderada por el sargento del ejército de Estados Unidos de la 2ª División Armada, Don ‘Wardaddy’ Collider (Brad Pitt), quien junto sus hombres y tratará de liberar lo que queda del ejército nazi y al fin regresar a casa. Lo que no tenía planeado es que le asignarían un joven novato como artillero (Logan Lerman), nunca probado en batalla.
La película es cruda, visualmente hablando. El director David Ayer no teme en ser explícito con la manera en que se desataban y vivían los conflictos bélicos de la guerra contra los nazis; sangre por aquí, viseras por allá, la inocencia de un novato que jamás había matado, la cruda realidad. ¿Y cuál es el arma para esta batalla? Unos impresionantes tanques.
Las actuaciones son muy sólidas, la parte fuerte de Fury. El elenco en verdad hace detonar el sentimiento de camaradería a su más singular estilo. Podemos ver a un Shia LaBeouf en un papel poco común, Michael Peña te hará sacar varias carcajadas y Logan Lerman siendo el de los que más resalta.
Los personajes generan cierta empatía con el espectador, se siente ese sentimiento de camaradería, mientras que el sangriento campo de batalla infunde horror. Hay muchos momentos impactantes, sin embargo, no hay un punto dramático realmente alto. Así como tampoco hay algo novedoso que Ayer le haya agregado al género.
Conclusión
La artillería pesada de Fury recae en el talento de sus actores y en el campo de batalla. Es un vistazo realista al oscuro corazón de la guerra, por lo que tienen que pasar los soldados, las perdidas, las consecuencias, el heroísmo y la camaradería.
Calificación 8.5/10