Como cada año, un nuevo Call of Duty llega a nosotros. Para este 2020, Treyarch, Raven Software y Activision optaron por retomar la serie de Black Ops y transportándonos hasta la Guerra Fría. Aunado a eso, es el primer juego de la franquicia disponible en consolas de nueva generación. ¿Es Call of Duty: Black Ops Cold War una memorable experiencia en esta legendaria franquicia de shooters?
Sirviendo como secuela directa del Black Ops original, este título nos transporte a la década de los 80’s, justo en el centro de la Guerra Fría. El espía ruso conocido como Perseus ha reaparecido y planea un ataque que podría cambiar el rumbo de la Guerra Fría de manera drástica. Un equipo de operaciones encubiertas conformado por Russell Adler, Alex Mason y Frank Woods tendrá que descifrar los planes de Perseus y detenerlo antes de que sea muy tarde.
La historia de Call of Duty: Black Ops Cold War se aleja un poco más de la acción que vimos en Modern Warfare para adentrarnos en el juego de espías de la época. No se trata de abrirte paso a balazos en un campo de batalla, sino de infiltrarte en locaciones de gran importancia, recuperar documentación importante y mantener tu cubierta. Obviamente tendrás tus balaceras en algunos momentos, pero el espionaje es el foco principal y el juego captura muy bien la temática. Inclusive la ambientación de la época, desde Berlín hasta Moscú es maravillosa.
Para muchos fans, Call of Duty tiene que tener una historia atractiva para valer la compra. Black Ops Cold War cuenta con esta interesante narrativa que en tiempo se queda corta a comparación de otras entregas. En unas 4-6 horas habrás concluido el juego, dependiendo si realizas las misiones secundarias. ¿Cómo lo compensan? Hay 3 distintos finales que dependen de un par de decisiones que hay que tomar, invitándote así a rejugar la campaña un par de veces más. Incluso, la última misión será diferente.
La piedra angular de los Call of Duty. El multijugador, a pesar de ser muy frontal y agresivo presenta algunas sensaciones negativas. Una vez que saltas al combate en línea te das cuenta de que la sensación es muy diferente a lo que nos tenía acostumbrado Modern Warfare. Simplemente parece que eliminar oponentes requiere más balas a lo que debería.
La personalización de armas es más grande que nunca, con una increíble variedad de aditamentos para cada una. Vas a tener que grindear un poco, pero afortunadamente, la progresión de armas se comparte también con zombies.
Por otro lado, con tan solo 8 mapas de lanzamiento, la rotación se vuelve repetitiva en poco tiempo. Sabemos que Activision lanzará paquetes de contenido constantemente, pero de inicio se siente corto.
En cuanto a modalidades de juego, tenemos las favoritas y clásicas de siempre, desde Team Deathmatch para el combate frenético, hasta Search & Destroy para los que gustan de partidas tácticas.
También Treyarch decidió experimentar con algunas modalidades nuevas. Dirty bomb es una especia de mini royale tipo plunder donde hay que conseguir uranio y explotar bombas. Combinad Arms, por su parte, es un Ground War con vehículos, por poner de cierta forma. Habiendo jugador varias partidas en ambas, no creo volver a ellas en el futuro.
Hay que hablar también del sistema de Scorestreaks. Tratando de equilibrar un poco las cosas entre para los más casuales, ahora los scorestreaks no se resetean al morir. Entre mejor sea tu racha más rápido obtendrás tu UAV, tu helicóptero o lo que tengas asignado, pero incluso los novatos tendrás la posibilidad de conseguirlos.
Los zombies, que estuvieron ausentes el año pasado en Modern Warfare, están de vuelta. No hay cambios considerables en cuanto a sus mecánicas. Por ahora solo hay un mapa (una versión aumentada del primer mapa en la historia de zombies) lleno easter eggs, trucos y varios misterios por descubrir. La mejor forma de disfrutar este zombies es cuando con amigos, pues hay que coordinarse y saber priorizar en lo que hay que comprar para sobrevivir las oleadas de muertos vivientes. Puedes jugar la modalidad infinita o la de 20 rondas.
El cambio más notorio es que puedes iniciar directo con tu loadout, ahorrándote la tertulia de gastar recursos en armas innecesarias. También hay una tercera modalidad llamada ‘Onslaught’ para darle un poco más de variedad, aunque solo es para 2 jugadores.
Cabe destacar que Black Ops Cold War sí cuenta con características especiales para quienes juegan en PlayStation 5 con el nuevo DualSense. Aprovechando los gatillos adaptativos del nuevo control, cada arma tiene una sensación diferente. Disparar un rifle de francotirador va a ser más “tosco” a una pistola, y los gatillos te ayudarán a generar esa tensión del gatillo.
Si la función te incomoda, se puede desactivar, aunque recomiendo utilizarla por lo menos para la campaña.
Call of Duty: Black Ops Cold War se siente como un paso atrás en la franquicia. La historia resulta muy entretenida y refrescante con el cambio de tono, además de que te invita a jugarla en más de 1 ocasión y cuenta con elementos interesantes
Por el contrario, el multijugador carece de contenido y genera cierta incomodidad en cuanto a la sensación de juego. Definitivamente Warzone y Modern Warfare seguirán siendo mis opciones principales, siendo complementadas, eso sí, por el modo zombies de Black Ops Cold War.
| Review | Call of Duty: Black Ops Cold War |
| Author | VGEzone |
| Resumen | Una campaña de espionaje atractiva, un inconsistente multijugador y zombies divertidos |
| Calificación | 3.5 (out of 5) |
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